Enfermedades Respiratorias en adultos mayores y recién nacidos

Son la principal fuente de enfermedad en bebés hasta los 3 años y representan la principal causa de discapacidad en mayores de 65 años.

El Gobierno y las autoridades sanitarias adelantaron y extendieron las vacaciones de invierno en todos los establecimientos del país, tanto públicos como privados, debido al aumento de virus respiratorios que presionan fuertemente los servicios de salud.

A diferencia de los dos años anteriores, el COVID-19 se encuentra circulando junto a los virus estacionales de invierno habituales como el Virus Respiratorio Sincicial, influenza, Parainfluenza y el Adenovirus, mencionando los más recurrentes.

Los más afectados son los recién nacidos

La Ministra de Salud, Begoña Yarza, aseguró frente a la prensa que: “Tras dos años de pandemia en Chile, muchos niños que permanecieron encerrados no han adquirido la inmunidad necesaria para hacer frente a estos virus estacionales”.

Una visión de la realidad compartida por la Dra. Luz María Grez, Pediatra del HSO Luis Tisné, quien aseguró que “los factores de riesgo para enfermar más gravemente la tienen niños menores de 3 meses, niños que hayan nacido prematuros o que presenten antecedentes de cardiopatías congénitas, que tengan enfermedades crónicas, desnutrición o sean inmunodeprimidos y niños expuestos a tabaco intradomiciliario”.

Dra. Luz María Grez, Pediatra.

Los principales afectados por estas enfermedades son los bebés recién nacidos y niños hasta los 3 años.

Para aquellos usuarios que tengan un familiar dentro de ese rango etario, la Dra. Grez entregó algunas recomendaciones para el cuidado de la salud en el hogar.

  • Promover la lactancia materna exclusiva, el lavado frecuente de manos o uso de alcohol gel
  • Evitar el contacto con enfermos, en caso de hermanos o padres resfriados uso de mascarilla y distanciamiento físico dentro de lo posible
  • Estornudar o toser en el antebrazo
  • Evitar ir a lugares cerrados como mall, supermercados, cines, eventos o cumpleaños.
  • Mantener un ambiente libre de humo de tabaco: no fumar dentro del hogar o cerca de tus hijos.
  • Ventilar los espacios cerrados.
  • Preferir una calefacción no contaminante, ideal eléctrica
  • Vacunar a tus hijos, sobre todo con la influenza a los mayores de 6 meses.

Llamamos a padres, madres y cuidadores a que estén atentos a los siguientes síntomas en los niños y niñas: moqueo, apetito reducido, tos, estornudos, fiebre y silbido leve al respirar. Y en los bebés muy pequeños, irritabilidad, menor actividad y dificultad para respirar.

Principal causa de discapacidad en adultos mayores

Los últimos datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que las enfermedades respiratorias se consideran la principal causa de discapacidad severa en adultos mayores, superando incluso a los accidentes cerebrovasculares.

Hace 20 años, el 16% de los hospitalizados mayores de 65 años en Chile tenía relación con problemas respiratorios, actualmente esa cifra se eleva al 25%.

Dra. Carolina Espinoza, Geriatra.

Con el objetivo de disminuir estos datos, la Dra. Carolina Espinoza, Geriatra del HSO Luis Tisné, entregó algunos factores de riesgos que debemos considerar para los adultos mayores:

  • La inmunosenescencia, es decir la afectación que sufre el sistema inmune del adulto mayor asociado al proceso de envejecimiento, lo cual predispone a presentar ciertas enfermedades, dentro de estas las infecciosas.
  • Los cambios fisiológicos que ocurren con el envejecimiento en el aparato respiratorio
  • La mayor prevalencia de enfermedades crónicas respiratorias como EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica), asma o fibrosis.
  • La presencia de trastornos de deglución.
  • La presencia de patologías crónicas como DM (Diabetes Mellitus), HTA (Hipertensión Arterial), enfermedad renal, patologías cardiovasculares, sobre todo si es tan mal compensadas.
  • Hábitos nocivos como el tabaquismo o alcoholismo.

Nuestro Hospital se une a las recomendaciones que entrega el Ministerio de Salud durante la contingencia, tales como el aseo de manos con frecuencia, cubrirse la boca y la nariz al toser y estornudar, limpiar bien las superficies de la casa, evitar aglomeraciones y el consumo de cigarro, calefacción con carbón, leña o parafina.