Estamos en esa época del año que amanece muy frío, luego aparece el sol a calentarlo, y las noches vuelven a estar gélidas. ¿Cómo cuidar a bebés y adultos mayores con estos fuertes cambios de temperatura? Aquí te contamos.
Las bajas temperaturas pueden tener efectos adversos en la salud y bienestar de dos grupos: bebés y adultos mayores. Por eso, es importante tomar medidas preventivas para mantenerse seguros y cómodos durante esta époc. Aquí hay algunas recomendaciones claves:

Para bebés
Vestimenta adecuada: Viste a los bebés en capas para mantenerlos abrigados sin sobrecalentarlos. Utiliza ropa de algodón suave y ponles un abrigo apropiado cuando salgan al exterior.
Cuna y sueño: Asegúrate de que la cuna esté libre de mantas sueltas o juguetes que puedan interferir con la respiración del bebé. Utiliza mantas seguras para mantenerlos calientes mientras duerme.
Control de la temperatura interior: Mantén una temperatura confortable en el hogar. Evita que la habitación esté demasiado caliente o fría. Un rango de temperatura de 18-20°C es generalmente adecuado.
Hidratación: Asegúrate de que el bebé esté bien hidratado, ya que el aire frío y seco puede causar deshidratación. Ofrece fórmula, leche materna o agua según las indicaciones del pediatra.

Para Adultos Mayores:
Abrigo y ropa apropiada: Asegúrate de que lleven puesta ropa abierta cuando salgan al exterior. Incluye gorros, bufandas y guantes para proteger las extremidades del frío.
Cuidado de la piel: El frío puede resecar la piel. Asegúrate que use lociones hidratantes y cremas para prevenir la sequía y las grietas.
Control de la temperatura: Mantén una temperatura confortable en el hogar. Si es necesario, utiliza calentadores o mantas eléctricas, pero asegúrate de seguir las instrucciones de seguridad y evitar el sobrecalentamiento.